algo para que lean y comenten

Hola hola:
Ahora, en el silencio de la habitación que nos alberga a mi y al computador, se me viene a la cabeza este pequeño espacio privado, o no tan privado, que con tanto entusiasmo crée ya hace un tiempo.
Bueno: Una de las cosas que he hecho en estas largas pero insuficientes vacaciones, ha sido leer y escribir. Y sobre esto último he tomado la decisión de subir algo.
En resúmen comento que es un poema en prosa, una prosa dudosa, pero prosa al fin y al cabo jajajajaja...
Bueeeno... creo que me estoy tardando muchísimo más de lo necesario.
Acepto críticas, insultos, sugerencias y demaces, aunque ruego encarecidamente que sean sin improperios por favor.
Okey, aquí abajo va, con título incluído.
besotes.

Mundo


Mundo, escuchad, escuchad atentamente
Yo soy como aquel canario prisionero en su jaula de oro
Que bate sus alas furioso en busca de su libertad,
Soy aquella mariposa a quien han quemado sus alas,
Pero que sobrevivió al fuego cruel que la destruyó,
Soy aquella entidad, confusa, difusa, que arrastra su desdicha por el mundo, que la esconde, pero que por más que trata no la puede ocultar
Soy la muchacha de ojos marchitos, que tantas veces visteis, pero que no pudisteis percibir porque el mundo me olvida, me olvida una y otra vez y me oculta con rapidez en su maraña de trampas. Y yo caigo, caigo mil, un millón de veces, y caigo, a un abismo que jamás se acaba, caigo con furia, caigo rápida, inalcanzable, todo el tiempo y jamás me veis, ni podéis oír mi clamor de socorro, porque el mundo y sus trampas me ocultan con furia.

Estoy en los bosques, estoy en el mar, vivo donde quiera que tú estés, pero no puedes verme porque me he vuelto invisible, imperceptible. Solo doy tumbos en esta gran red,
Lamento a ojos cerrados las ausencias de quienes tanto amé,
Lamento a ojos cerrados caer y rebotar contra las paredes de esta red,
Lamento a ojos cerrados mi infinita soledad,
Lamento a ojos cerrados no tener nada, no sentir, no alzar mi voz para poder decir te amo,
Lamento más aún mi desdicha, tu desdicha, la desdicha de todos, que seguirá existiendo, que no se acabará,
Lamento a ojos cerrados la tristeza en mis ojos y en los tuyos, aunque a veces se va, pero solo me queda atisbar en el vacío que existe, pero que yo no puedo percibir.

Te he buscado, y no estás,
He gritado tu nombre hasta cansarme, pero tú no estás para escucharlo,
He esperado los golpes de tus manos suaves a mi puerta,
Pero no apareces, te me escapas sin remedio posible.

¿Será posible que en el mundo exista otra como yo?, otra entidad difusa que dé tumbos sin querer y sin parar?

Solo tú, solo tú al igual que yo, caes, caes y seguirás cayendo, sin detenerte,
Tú, solo tú, seguirás cayendo en esta red, en sus trampas, en su maraña de trampas, que no tiene otro nombre que

¡Mundo!.